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Todo puede cambiar...

La vida es un proceso de evolución. Todo cambia, como seres humanos estámos constantemente, renovándonos... o evolucionando para atrás.... depreciándonos...

Todo puede cambiar en tu vida, si cambias ahora mismo tu actitud. Las deudas, los problemas, los desánimos, la soledad. Los problemas, pueden cambiar, si tomas decisiones acertadas y das pasos, aunque sean pequeños, pero te mantienes caminando.

La vida se presenta como un reto, a nosotras las mujeres. Si no es el dolor premenstrual, es el dolor por la enfermedad de nuestros hijos. O quizás la frialdad de una separación, o la lágrima vertida por una incomprensión. El llevar el pan a la mesa, no es tarea fácil, el sentir que das todo lo que tienes, y no hay una palabra cariñosa que te diga "lo hiciste bien" "eres una valiente".

Y si la vida a veces se presenta como una "obligación", no tanto como una "diversión" y en medio de todas las cosas nos detenemos por un momento, en un rincón, en una esquina de la casa, a soltar una lágrima, o quizás un quejido. O quizás vamos en el auto, desconsoladas, porque no encontramos el camino indicado.

Todo en esta vida tiene un plan. Siéntate, haz tu plan de vida. Pregúntate a tí misma en unos años en donde te gustaría estar. ¿Qué te gustaría estar haciendo?. Anota tus metas, aunque sean pequeñas, y trata de alcanzarlas. Son los pequeños engranajes, los que ayudan a que las ruedas grandes se muevan... Es así también que son los pequeños pasos los que hacen que los grandes sueños empiecen a tomar forma.

No dejes pasar la oportunidad de darte un tiempo para ti misma. Pregúntate, qué has dejado pendiente en el camino y retoma las cosas que no has podido finalizar. Y organiza tus pensamientos. No podemos ser barcos sin timón, movidos por el viento... si no tenemos un plan de vida, iremos indefectiblemente a chocar contra las rocas...

Todo puede cambiar si tu te lo propones en tu alma. Solo toma un poquito de tiempo. El mínimo esfuerzo, y entender que se trata "de tu vida".